sábado, 31 de marzo de 2012

Dos vidas para la felicidad


Inmediatamente después de que cayeran las últimas hojas, llegó el invierno, y con él, los recuerdos de vidas pasadas; recuerdos que mantenían caliente al corazón. Pareció que hubiese pasado toda una vida, pero lo cierto es que el tiempo se esfumó, como las últimas hojas, y todo volvió a ser como lo fue antes, desde un buen principio…

El mundo y el miedo. El verbo y el amor. Nadie dijo que fuera fácil. Es más difícil huir; echar a correr. Es más fácil quedarse y vivir callando. Pero no todo puede callarse. Al final el silencio puede llegar a matarte.

Los días son bonitos, como nuestros rostros al contemplarlos. Ver el último día junto a ti, eso sí es lo más bonito del mundo.


Después de años escondido bajo las piedras de su pirámide hecha a medida salió a contemplar los oasis que le rodeaban. No creía en lo que veía, pero al menos sabía que estaba viviendo.

La brisa del mar, las risas de la gente, los cucuruchos de fresa, las coles del huerto, un cuadro de Chagall. En eso se resume todo, y todo se resume en eso. ¿Qué quieres hacer aquí?, ¿crees que puedes elegir?, ¿crees que tienes derechos?

¿Qué vale un cucurucho de fresa?, ¿qué precio tiene una col de tu huerto?, ¿qué valor le das a tus manos?

Subes unas escaleras que te llevan a ninguna parte, y por fin dejas de tener miedo a la soledad. Por fin vuelves a sentir que estás en algún lugar, quién sabe dónde; pero es algún lugar. Puedes volver a empezar otra vez. Puedes conectar tus inquietudes con el futuro incierto. Puedes ser optimista, o puedes desaparecer. Pero puedes aprender a perder, puedes saber que es caer, y puedes proclamarte vencedor aún y así.

Y si eres feliz a quién le importa.

miércoles, 28 de marzo de 2012

Poesía.


Quizás poesía, solo poesía
sea lo que me has dado.
Llamar a las palabras y venid poesía.
Proclamarte en alto, y decir poesía.
Buscarte en vano, y gritar poesía.

Quizás sea el mayor legado
tu amor en vida.
O quizás sea, tu MAYOR POESÍA.
Gritar tu nombre y volver en  eco
Poesía.

Desentramarte en muerte
y sorprender poesía.
Encontrarte en otros,
y ver poesía.

Porque al final de tu vida
Tu alma, tu cuerpo hinchado,
tus dedos,
eran poesía.

Porque me provocas, poesía.
Porque te llevaste,  POESIA.
La poesía de mi vida.

Un domingo en madrugada
me faltaste.
Poesía.
Y nunca más volviste.
Poesía.

Deja ya de burlarte, tu,
poesía.
Y devuélveme a la poeta
que se llevo mi vida.

Gorgónea


-Mentira. Todo lo que has dicho ha sido mentira. Ya no puedo creerte.
-Lo siento.

Gorgónea me mintió, me ocultó durante más de veinte años su romance con Nicom. Estaba furioso y al mismo tiempo me sentía impotente, ya no se podía hacer nada más. El tiempo había seguido su curso y Gorgónea también. ¿Cómo pensar que algún día podría cambiarla? Siempre fue más fuerte que yo. 

Nos conocimos hace unos mil años, mi vida estaba completamente vacía, y pese a que siempre lo estuvo, al menos su sombra y su recuerdo equilibraron la balanza del miedo durante un corto plazo.

Su mirada fue una picadura venenosa de la que jamás pude recuperarme. Si aún estoy, herido estoy. Ella siempre fue muy dolorosa, me asustaba pero me atraía enormemente, sin medida, perdiendo el control de todo lo que un día creí. Sabía que me mentiría constantemente, pero jamás pensé que se burlaría de mí con mi peor enemigo: Nicom.

Fue el destino, sí, más tarde lo leí y allí estaba escrito, pero en aquél instante jamás me hubiese dado cuenta. Su veneno aún me quema, no dejo de pensar en su melena y en sus ojos, siempre quise que fueran para mí, pero ella jamás me correspondió. Te echo de menos, aún tengo clavadas tus uñas en mi espalda y guardo uno de tus cabellos con el que duermo durante toda la eternidad.

Hoy, un día más para el resto, nada más para mí, he pintado a mi doncella en un espejo para poder verme junto a ella. No sé dónde estás Gorgónea; yo estoy en el infinito, esperándote, mintiéndome a mi mismo como siempre pensando, recitando poesía para mis adentros, soñando que sueñas conmigo mientras duermes con Nicom.

Tengo miedo, no quiero pensar en que voy a sufrir si ya nunca estarás aquí. Estoy solo y así estaré, esperando a que alguien me diga hasta cuando, aunque dudo que alguien pueda decírmelo.

Me duele lo que nunca supe, lo que nunca conocí.

lunes, 26 de marzo de 2012

Con-Razón Nocturna

Por la mañana
la razón se apodera de mi consciencia.
Me trae a la “coherencia”.

Por la noche, sin embargo,
mis percepciones se amplían,
son dueñas de mi sien.

Puedo tan sólo
con observar la llama de un cigarro
sentir el fuego y el carbón.
El esfuerzo en mis pulmones.

Me cuesta respirar.

Por la noche
soy mí misma.
Y me embriaga la lucidez del inconsciente.
Me posee la “verdad”.

Bailo enajenada ante el oscuro,
río a carcajadas del absurdo,
canto bacanales al aire,
toco  el terciopelo de la nada.

Observo, y mis pupilas se agigantan.
Me cuesta respirar.
Y sin embargo
me siento viva.

Por la noche,
En el límite de lo perenne
puedo volar.
Ella me aoja, se mueve artera.
Me seducen ideas insensatas.
Ella sabe quien soy,
me conoce.
Me reverencia incondicional.

Por la mañana,
la coherencia vuelve a apoderarse.
Vuelve la razón a mí.

Y salgo desnuda a la calle
al frío invierno de la soledad entre los otros.
Soy vulnerable, endeble.

Enciendo un cigarrillo
para recordar que por la noche
ella volverá para contarme
quien soy en realidad.

A cantarme y a reírse

Mientras tanto,
por la mañana,
Fumo para llenar mis pulmones,
y dejar un ápice de mí
entre tanta luz diurna. 


Y los puntos se conectaron con las líneas

Lo que siempre quisimos expresar se quedará aquí. Todas las palabras con las que impregnamos los cuadernos y las paredes querrán encontrar un nuevo lugar en el que reposar. Admiramos demasiadas cosas, muchísimas se nos escapan... Pero amamos lo que brota como una expresión de libertad.

Dedicamos este blog, antes que nada, a dos personas que siempre amaremos porque son las palabras y los dibujos que llevamos bajo la piel y que hacen que recobremos todo el sentido.

A Dolores y a María de los Ángeles.